¿Qué son y cómo funcionan las ondas de choque?
Las ondas de choque llevan utilizándose con éxito en la Medicina desde hace más de 30 años. En 1980 se comenzaron a utilizar en Urología para la destrucción de los cálculos renales (litotricia) y en la década de los 90 se comenzaron a aplicar en el campo de la fisioterapia para la recuperación de lesiones crónicas en músculos y tendones.
Las ondas de choque son ondas acústicas de pulso único, con un pico de energía extremadamente alto y una gran amplitud de presión.
El término “terapia con ondas de choque” se refiere a los pulsos de presión mecánica que se expanden como una onda en el cuerpo humano. La terapia por ondas acústicas extracorpórea (en contraste con la litotricia) se usa para provocar efectos biológicos microscópicos intersticiales y extracelulares, entre los que destaca la regeneración de tejidos.
Durante los últimos años se han realizado varios ensayos clínicos para comprobar la eficacia de las ondas de choque en la celulitis micro-nodular y macro-nodular.
En las ecografías realizadas se ha detectado también cierta reducción del grosor de la capa grasa, una reducción del edema presente en los tejidos y una mejoría de la circulación.
El aparato emisor genera ondas de presión de alta energía que el paciente siente como una fuerte vibración, y entre sus efectos terapéuticos se busca la rotura parcial de los septos fibrosos causantes del aspecto de la piel de naranja.
Esta vibración genera también una importante activación de la circulación y un importante drenaje de la zona, así como una estimulación del metabolismo de las células grasas (adipocitos), disminuyendo el tamaño de las mismas mediante la permeabilización de su membrana celular, para que la grasa acumulada dentro de los adipocitos salga al sistema linfático y se elimine de manera natural, por medio de un proceso metabólico normal del organismo (por vía biliar hasta el intestino) o sea reutilizada como forma energética por los músculos de nuestro cuerpo.
Las ondas de choque propician de forma segura y efectiva la reparación de tejidos y crecimiento celular ya que facilitan la generación de nuevos vasos (neovascularización), garantizando así un flujo de nutrientes y oxigenación elevados en la zona tratada. En efecto, La aplicación de ondas acústicas crea micro-roturas de capilares, lo que aumenta significativamente la expresión de los indicadores bioquímicos de crecimiento en nuestro organismo (conocidos como VEGF, PCNA y BMP…).
Estos procesos estimulan el crecimiento y la remodelación de nuevos vasos sanguíneos (arteriolas), quemejorarán el riego sanguíneo y la oxigenación en la zona. Paralelamente las ondas de choque facilitan la producción de colágeno mediante la aceleración en la síntesis de su precursor (procolágeno), mejorando así la elasticidad, firmeza y textura de la piel, y observándose un alisamiento y rejuvenecimiento de los tejidos tratados.
https://www.youtube.com/watch?v=KlABNe9kjm8
ResponderEliminarse va ya un poco más al campo médico pero es interesante.